Este dúplex se encuentra en una de las calles más transitadas del barrio de Isla Chica, de Huelva capital.
Cuando lo visité por primera vez el piso no me causó buena sensación, era un piso interior, que a priori se veía oscuro, ya que sus ventanas estaban muy sucias impidiendo pasar la luz, sus paredes tenían multitud de agujeros y marcas, sus puertas, aunque las habían lacado, habían amarilleado con el paso del tiempo, en definitiva, el primer pensamiento que se venía a la cabeza al visitarlo, era que había que hacerle reforma, además, 2 de los dormitorios parecían bastante pequeños.
Tras una limpieza exhaustiva de paredes, ventanas y puertas, el piso ya se veía amplio y luminoso, ya que aun siendo interior, era una planta séptima, sin edificios más altos alrededor, que le impidieran la entrada de luz.
Amueblé los espacios con muebles de cartón, para que el cliente pudiese proyectarse en sus estancias y evitar la sensación de que los dormitorios eran demasiado pequeños, sinceramente, hasta yo me sorprendí, al comprobar como en los dormitorios, entraba cama, escritorio y armario sin agobiar el espacio.
Era primeros de Agosto, así que los tejidos que utilicé fueron frescos, en las camas por ejemplo, simplemente sabanas, las cortinas de algodón blancas y procuré que en todas las estancias apareciese fibras naturales, que aportase ese toque veraniego.
El resultado fue, que cuando terminé, estaba enamorada del piso, llegué a plantearme comprarlo yo misma, pero no dio tiempo, en 20 días se cerró su venta, 6000 euros más de lo que se había estado pidiendo durante el año que había estado a la venta sin éxito, antes de realizarse el Home Staging.